12.6.08

toc_ando

Imaginate que me despierto. Que me duermo y me despierto. Que el viento es sólo viento y que yo, camino y camino y duermo y duermo. Imaginandome que al despertar veo y camino y veo. Como si no terminara nunca, y pienso entonces, recuerdo como fué todo y como estaba yo ahí, respirando hondo y sabiendo nada. Pensando todo como a la mañana, de primera vez, de pocas acertadas cartas.

Me recuerdo decadente de casi sonidos no conocidos, nuevos pero no muy muchos, no muy poco tantos.

Par de anotaciones en el cuaderno y no olvidar. Decír para no recordar. Para no rociar de anhelos, sabidos.

Para que luego ya sin de pronto tú otra vez y yo nuevamente de cero para hasta no desmayar. Sin conocernos ni nada de siempre.

Aquí y allá.

Entre la geografía.

Luego como decías tú siempre, para arriba, para arriba. Diciendo sin estar y yo como siempre estando sin decír. Alejados para abandonarnos. Sí.


Mis corazones secretos. Como si con otra cosa pudiera mi aliento decirte tocando.

No tienes nada ya despues de todo. De nada vale la ciudad, en ese café en el que nunca estuve, o ese departamento del que siempre quise despegar. Caminando sólo, de donde estuviste no, de las aceras contenidas una tras otra, los recuedos de sueños que no están y que no fueron.

La brisa invisible de la lluvía que cayo antes, que ya no cae y aún así, me moja, el brillo en el pavimento que dibuja tu silueta en los charcos grises, cristalinos y casi blancos bordeados con negros.

Las serenatas que no acaba, y sé terminaran, mi mente que vuela, mi mente que siente, mi mente que no sabe y baila, que no entona y canta, que no te ve.

¿A donde voy? Y sabiendo eso, ¿Donde terminaré? ¿Llegaré pronto, justo, listo?

Dibujaré con rayas mi existencia inquebrantable y efímera. Bailaré entre los blancos de mis hojas, marcando contornos rapidos y deformes, lindos, huecos. Marcando así la nota de las horas. De los lugares de mis amigos, de mis personas conocidas casi enmarcadas en nombres.

No hay comentarios: