15.9.08

“El arte de escribir historias está en saber extraer
de lo poco que se ha
comprendido de la vida todo el resto;
pero terminada la página se reanuda la vida
y nos damos cuenta de que lo que sabíamos
es desde luego bien poco...”
Italo Calvino

Yo tan mal y tu tan lejos, con la sangre dividida. Tan poca vida. Un libro de muerte y vida y sin ningún sentido. No se podría observar mi vida. No se podrá observar. Hay tanto en mis ignorancias. El gran enfrentamiento con el todo. Debí alguna vez perderme en el camino, sin el gran camino. Seguramente moriré y sin comprender lo que eso signifique, creo que me pesa tanto como vivir.

Seguramente en este juego de las respuestas no existen dudas claras de lo que es. Yo aquí y no más. No se podrá decir que no viví. El problema es la conciencia. Una muy limitada e intermitente. Creo que si no estuviera tan triste no existiría. No escribiría. No a la soledad y no al capricho constante de la pareja. Pues no tendrá caso decir que no viví. Que no vivo. Las razones son el problema. Vivo y ya. Más no puedo decir que realmente viva mi vida. Ni negarlo tampoco y ciertamente me he de morir.

¿Entonces como he de vivir? Me queda claro que no viviendo. Esa vida. Vivir no viviendo hasta morir. Esa puede ser una respuesta y eventualmente moriré. Eso es todo.

No así él que pareciera solo vive todo el tiempo. Su muerte no sería relativa. Es más causal. Que me diferencia de ellos. El tipo de vida, el sentido y la felicidad. Supongo. ¿Y luego qué? Pues solo la muerte. Mía, tuya, ambas.

Lo único aquí incontenible es el dolor. El que se evita a toda costa. La felicidad se busca y se construye. Del temor se aleja y se disimula.

Soy muy malo para hacer ambas cosas. Soy bueno para pensar y solo pienso en cosas que no puedo comprender. Lo sé y saberlo no implica la correcta percepción del saber.

Entiendo que saber sería algo pero en realidad solo me sirve para saberlo y ya. Como que todo en la vida es tan finito y sin sentido que habrá que crearse un sentido. Algo muy vano por cierto.

Ahora, que se me de una respuesta congruente a todas las cuestiones tampoco es como una razón decente a menos que evite el dolor y para eso la medicina.

El pensamiento y la evolución del ello es como algo plausible. Y bueno no puedo negar que hay más personas en el mundo. Tantas que para eso es todo. Pero el sentido individual queda excluído. Seamos una sociedad. Pensemos en el otro. Me queda rogar porquse alguien más piense tanto en mi que su pensamiento, el tan correcto me rescate de mi sin sabéres. Podré ser al final ese alguien que a mi solo sirva lo que pienso.

Así que al final para mi no tendrá sentido. Dudo que para ese otro finalmente también lo tenga y erróneo que lo asimile así.

OH!, grave error.

Y viviré pues mientras no muera y moriré paulatinamente mientras vivá.

Podría cambiar todo tan de pronto.

Post por Rodrigo Ramírez @roQramirez
Escrito en 15.09.08