De los blogs y los tacos de tortilla

No tiene mucho que estoy metida en esto de los blogs.  Sabía que existían, pero se me hacía que la mayoría eran un montón de diarios virtuales puestos al público, y suficiente tengo con mis agobios como para leer las reflexiones sobre la vida de alguien más.

Buscando cosas sobre moda, me encontré que los blogs resultaban muy útiles para tener información fresca y rápida, sin los protocolos de una publicación impresa, con los beneficios de poder ver video, y sobre todo sin tener que desembolsar un peso.  Descubrí muchas maravillas, muchos blogs de muy buen contenido y sobre todo, original.

Al principio consumía todo tipo de blogs, me volví adicta a la información rápida... pero como toda adicción, después viene la malilla, el hastío, la saturación y la cruda.  Entonces me volví más selectiva, empecé a desarrollar un ojo clínico para reconocer los blogs que para mi valían la pena dependiendo de lo que buscaba y me resultaba interesante.

En un principio me parecía sumamente meritorio que alguien, aparte de sus múltiples ocupaciones cotidianas, tuviera el tiempo de postear y actualizar sus blogs.  Una parte de mí, estaba inquieta por hacer lo mismo que todos esos multitasks.  Nunca tuve una razón más allá que la de querer compartir ciertas cosillas de mi interés, pero la verdad es que esas cosas resultaban a veces tan escasas y yo tan huevona, que honestamente me pareció ridículo abrir un blog en el que postearía cada tres meses algo.

Desistí, y me dedique a navegar por los blogs como acostumbraba, me especialicé en mis gustos, y fui depurando mi lista de marcadores.  Fue cuando llegó a mi la pregunta… ¿por qué si ahora leo más blogs, tengo menos marcadores (en firefox) / favoritos (en explorer)?

Muy sencillo, llegué a la conclusión que muchos de los blogs que leía, tenían contenidos repetidos.

¿A qué se debe?

Pues porque resulta que hay un tipo de blogger, que al igual que yo, tuvo la inquietud de compartir sus intereses, pero poco talentoso, o con pocos recursos  o simplemente muy huevón como para crear sus propios contenidos, así que lo que hizo fue un blog que resumía el contenido de sus blogs favoritos…después de todo, ni tan multitask.

En la evolución del social media llegó twitter, que sirvió de herramienta a todos los bloggers para hacer del conocimiento de sus followers contenidos “nuevos” en sus blogs.  Esos “nuevos contenidos” son imágenes, incluso textos re-bloggeados de otros blogs.  Incluso podemos encontrar posts re-bloggeados de blogs que a su vez ya habían re-bloggeado este mismo….una cadena infinita de información repetida una y mil veces.

El aviso oportuno en Twitter del nuevo post que nos da el link al blog, resulta por completo inútil.  No sería mas fácil, que pusieran el link del post en el blog original del que salió y de paso se lleva bien el crédito su creador?

Me parece, que si alguien, no tiene la capacidad de crear sus propios contenidos, debería dedicarse únicamente a twittear sobre sus intereses, porque un blog hecho de posts de otros blogs, es como comerse un taco de tortillas.

Post por Adriana Meza
@Adrianaviolenta